viajerapunzel

viajerapunzel

martes, 10 de septiembre de 2013

Ávila

Es una ciudad con mucho encanto y es posible visitarla en un día.

Rodeada por una muralla y con iglesias, puentes y calles empedradas, puedes pasear por una ciudad que tiene bastante ambiente y muchos sitios de restauración. 




Es un poco agobiante porque por el centro (llegando la hora de comer), todos los restaurantes se empeñan en hacerte ir a su local y te meten publicidad por los ojos. Así que yo solo puedo recomendaros comer por sitios más apartados, que están menos masificados y por mi experiencia, se come genial.
No dejéis de probar las Yemas de Santa Teresa, que son típicas de Ávila y están buenísimas!

Tiene una paseo peatonal paralelo a la muralla con figuras de hierro. Es muy agradable andar por ahí, aunque reconozco que de noche llama más la atención.
Al final de este paseo llegas a la Plaza Santa Teresa, con mucho ambiente y terrazas para tomar algo.

Se puede subir a la muralla, pero si mal no recuerdo, cierran sobre las 18.30 (yo fui en día laborable, quizás en festivo sea distinto) y se tarda como una hora en recorrerla, para que tengáis cuidado con los horarios porque yo me quedé sin verla.

En mi visita, la catedral se encontraba en obras, por lo tanto no tuve el gusto de verla totalmente. Pero supongo que será como todas: inmensa y llenas de figuras religiosas.



Lo mejor es aparcar fuera de las murallas, ya que el tránsito por el mismo centro es complicado.

Al dejar la ciudad por la Ctra. de Salamanca, hay unas ruinas desde donde tendrás unas espectaculares vistas a la muralla. Se conocen como 'los Cuatro Postes'. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario